Retozando sobre la piedra mojada

Que mejor sitio para pasar un sábado por la tarde que las calas de piedra caliza de St. Tomas Bay.  Parada para merendar chapuzón junto a los peces, que se acercan a nosotros, con la misma curiosidad que nosotros nos acercamos a ellos. Las criaturas siguen disfrutando en cualquier charquito que les pongan...

En la playa de San Peter´s Pool

La playa está a media hora de camino desde el pueblo de Marsaxlokk, pero un amable lugareño, que está buscandose la vida, nos aconseja ir en coche para no perdernos y no cansarnos. Aceptamos el viaje por 10 €, sobre todo para no perder más tiempo... - El lugar es mágico - Piscinas naturales junto al mar, nos alejamos de la primera entrada al agua, y estamos solos en este paisaje lunar pintando con fondo azul marino.

Aquí no me hace falta el bañador, menos mal, porque no tengo. Salto al agua desde una roca de poco más de un metro de altura, y cuando Saúl me sigue, me doy cuenta que volver a la orilla no es tan fácil como parecía. Las olas golpean con fuerza contra las rocas, y salir del agua se convierte en un momento de tensión. Por fin me agarro a una piedra y logró una posición estable, Saúl con un par de rasguños en el brazo vuelve a la orilla también.

Volvemos a las piscinas más concurridas, y aquí tengo que lucir mis calzoncillos azules, no hay otra. En estas piscinas hay varios puntos para saltar al mar delsde distintas alturas. Yo no quiero arriesgar, pero Saúl no puede renunciar a un par de saltos, que quedan inmortalizados para la posteridad.

Este rincón nos lo llevamos ya para siempre en la memoria, y aquí compartimos con el resto de la galaxia, una pequeña porción de lo que allí vivimos.




 

Marsaxlokk y la mochila perdida

Hoy hemos visitado, uno de los pueblos más bonitos de esta isla. Marsaxlokk -Un sitio que huele a mar y a pescado desde que te bajs del autobus. Un sitio tranquilo y con muy poco ruido, y con un colorido inusual en esta isla que le proporcionan las barcas de los pescadores amarradas al puerto pesquero. Por el paseo, junto al mar, algunos puestos de artesania y productos típicos, y varios restaurantes con una oferta de productos del mar que no vamos a dejar pasar.

Aquí perdí mi mochila, con mi toalla, bañador, gafas de bucear, cremita, y ropa de repuesto. Aún no recuerdo en que momento la solté, pero cuando me acordé de ella estabamos ya de camino a la playa.

Viajando en autobus

Todos estos días hemos usado la buena red de autobuses que comunica todos los puntos de la isla de Malta. El billete sale barato (2,6 €) y vale para todo el día. A mi cada vez me cuesta más explicar a los conductores del autobus que somos 2 adults and 2 children, porque se quedan mirando amis hijos y me dicen: How old are them?, y yo sin pestañear digo: "Nine and ten". El otro día el conductor me dijo mirándolos, que con esa edad ya no son niños, y mira que yo les digo que pasen rapidito..., así que al final tuve que sacar 3 adultos y un niño. Los niños sólo pagan cincuenta centimos, así que hoy y vuelto a decirle al conductor: "Two adults and two children". Menos mal que cada día vamos a un lado y cambiamos de autobus y de chofer.

A veces veo al conductor incomodo, al cobrarme, y yo le digo: "Que si, que te entiendo, pero me cobras 2 niños, que no lo parecen, pero son niños... - Menos mal que Inma ya no crece más, y cuando pasan así juntitos con el resto de la gente, pues tamoco se nota tanto...

Luego está el juego de las paradas de autobus, que como están muy cerca unas de otras, pues cuando llegamos a una, y no viene el autobus, pues nos vamos andando a la siguiente, y siempre hay muchos nervios, que si va a venir, que si yo ya no ando más, pero esto le da un poco de chispa a cada traslado...

Blue Grotto

Tarde, hemos llegado tarde. sólo un chapuzón y unas fotos en este lugar que bien habría merecido el paseo en barco que se adentra en las cuevas... Habrá que volver...

Comiendo conejo en Dingli

Nos ha costado llegar hasta aquí en autobus, pero el paisaje de los Dingli Cliffs prometía, luego los acantilados tampoco son nada del otro mundo, pero en el restaurante, que hace también las veces de centro de interpretación de la zona, nos hemos comido el conejo más rico que recuerdo, incluyendo a los de Leganés...

La ciudad de Mdina

La antigua capital de la isla nos proporciona una visita a la parte más monumental de Malta, lo que eran palazios son restaurantes, lo que eran iglesias siguen siendo iglesias, y como curiosidad visitamos el museo de las mazmorras de la ciudad, dedicado a las mil y una formas de tortura que esta gente ha conocido.

 ¡Que miedo!

 

Aprendiendo a jugar al mus

Aprovechamos la noche para los primeros pasos de Luna en el Mus...

Pedazo de terraza

Cuando llegamos a casa, nos damos a los placeres de las nuevas tecnologías, cada uno con su maquinita, conectando con el mundo, pero Inma no desaprovecha la oportunidad de disfrutar de la pedazo de terraza que tiene nuestra casita. Yo voy a por una cerveza para hacerla compañía...

Por las playas del Norte

Hoy mochila con bañador y toalla y gafas de bucear. Nos vamos en autobus a las playas del norte. Nuestra llegada, después de más de media hora de viaje, a la Golden Bay nos situa en la costa noroeste de la isla, bajo un complejo hotelero de "lujo", en donde después de darnos un bañito, empezamos a preguntarnos ¿Aquí que se come?.

El chiringuito del lugar nos ofrece una variedad de platos de pasta, ensaladas y hamburguesas, nada para tirar cohetes, ycon un plato para cada uno nos da para reventar. Ya te dije que era mucho!, si no te lo vas a comer pa que lo pides!, y que rico todo, pero yo no puedo más, son los comentarios, que mirando al mar nos hacemos...

Cambiamos de autobus y cruzamos a la costa este de la isla en Bugibba. Los autobuses con aire acondicionado nos gustan más que estar en la calle, porque el calor sin ser excesivo, te quita las ganas de andar. Después de otro bañito y refresco, paseamos por el litoral hasta el sicodelico edificio de un curioso restaurante, en el que los chorros de agua nos dan el frescor necesario para alcanzar la parada del siguiente autobus, que nos llevará de vuelta a casa.

Cumple y Atleti

Esta vez no pudo ser, el Atleti no pudo completar la jornada memorable. Pero la celebración ya estaba hecha. Una porción de tarta de manzana, y un 4 soplado dos veces, me ha servido para completar mi 44 cumpleaños junto a quienes más quiero.

En caballo hasta el mar

Desde el fuerte de Sant Telmo decidimos continuar nuestra visita en calesa. Saúl y Luna estaban ya algo cansados de andar y estaba haciedo mucho calor, así que, después de negociar el precio con el cochero, continuamos viendo los paisajes sentaditos y a la sombra, ¡esto ya es otra cosa! Hicimos parada para ver una enorme campana desde donde se divisaban unas impresionantes vistas. 

Nuestro recorrido terminó en un puertecito con "playa" incluída, donde nos dimos nuestro primer chapuzón, que tanto deseábamos. El agua estaba muy clarita y se podían ver un montón de peces. Después de tomarnos unos bocadillitos de jamón serrano (traído de España, claro está) y de tomarnos una cervecita, continuamos nuestra visita cogiendo el autobús hasta Kalkara.

 

Brindando por tod@s vosotr@s, mientras veo como chapotean en las azules aguas de la costa maltesa.

28 de Agosto - Valleta´s streets

Amanece un soleado día, desde nuestra terraza divisamos la ciudad de Sliema, pero hoy vamos a conocer la capital. Finalmente no tenemos coche, el apartamento se llevo el presupuesto de la gasolina, así que autobus y zapatilla, de momento.

El billete de autobus nos vale para todo el día, y en 15 minutos estamos en la Triton Fountain, que nos recuerda a Neptuno, y nos hace pensar como quedaría aquí la bandera del Atleti esta noche...

La Republic Street está muy animada, espectáculo en la calle y monumentos que nos hablan de años de historia, iglesias que nos hablan de que aquí también los mismos ocuparon los lugares privilegiados de la ciudad.

Visitamos todo por fuera, asomándonos discretamente a Santa Barbara, para que mis hijos se refresquen con el agua bendita. Hace calor, y buscamos las calles con sombra para llegar al fuerte de Sant Elmo.

 

Lo que les gusta un chorrito de agua a las criaturas...

DIA 1 - Prueba del apartamento superada

La cosa parecía fácil, pero se complicó. No teniamos atado lo del apartamento, y las leyes de Murphy se cumplieron una por una. Primero no encontramos a la persona con la que había contactado, luego nos mandan de un sitio a otro sin encontrar nada convincente, y finalmente ya cansados, Inma se queda en un parque con todo el equipaje con saúl y Luna, mientras me lanzo a buscar un hogar para los próximos días.

Otro día contaré como cambiamos 3 veces de apartamento, hasta encontrar la casa de nuestros sueños. Acostumbrados a las estrecheces de la caravana, este 5º piso con 2 habitaciones y dos cuartos de baño, y una terraza más grande que el salón de mi casa nos parece el lugar perfecto para conocer la isla. El precio un poco más caro de lo previsto, que se le va a hacer.

Estamos junto al paseo maritimo de Gzira, en un lugar bien comunicado, rematamos el día con unas pizzas, ensaladita y helado junto al mar.

Costura en la puerta de embarque

Pese a que llegamos con 45 minutos de adelanto a la puerta de embarque ya hay una cola que flipas.
Esto de Ryanair es lo que tiene, la gente lucha por su asiento desde el minuto 1. Inma no pierde el tiempo, sentadita en el suelo saca su aguja y su hilo, y se pone a reparar la mochila en la que viajan nuestros bocadillos...

Maletas hechas y coche aparcado

Hasta el último momento guardamos y sacamos cosas de la maleta. Esto no hace falta, esto por si acaso, esto lo llevas tú…

Bueno, ya estamos en el aeropuerto, hemos madrugado más de lo necesario, y ahora nos sobra media hora para escribir al mundo, comernos una manzanita, y la penúltima cerveza española.

Después de dejar a Inma y a “los niños” junto al mostrador de facturación, me voy de excursión a aparcar el coche en IFEMA. Ya nos ha copiado la idea un montón de gente, y cada vez cuesta más encontrar un hueco para aparcar.

En menos de 45 minutos estoy de vuelta, todas las maletas cumplen las restricciones de peso, y nos ahorramos el espectáculo de otras veces de cambiar cosas de un lado a otro.

Ahora nos queda la prueba de la puerta de embarque, voy a beberme todo el líquido que nos queda, y a esconder la navaja, ja, ja...

Parece que tenemos casa

Hoy pensamos ya sin parar en nuestro viaje. Que nos llevamos, que vamos a hacer, donde dormiremos, que comeremos. Nuestro viaje estaba sólo en nuestra cabeza, pero hoy empezamos a planear los detalles. Nuestro primer alojamiento será un pequeño apartamento en Gzira, que parece estar bien situado para abordar las excursiones que nos lleven a conocer los rincones de esta pequeña isla.